martes, 8 de septiembre de 2009

España comienza el europeo con muchas dudas.


Serbia
66
España
57
Ficha técnica
Serbia 66 (15+23+18+10): Teodosic (4), Tepic (10), Tripkovic (3), Velickovic (12) y Krstic (17) --cinco inicial--, Markovic (2), Paunic (4), Bjelica (2), Macvan (8), Raduljica (2) y Perovic (2).

España 57 (12+11+14+20): Rubio (6), Navarro (14), Mumbrú (-), Garbajosa (-), Marc Gasol (4) --cinco inicial--; Llull (9), López (3), Cabezas (-), Claver (-), Reyes (12) y Pau Gasol (9).
Árbitros
Romualdas Brazauskas (LIT), Olegs Latisevs (LET) y Robert Lottermoser (ALE). Krstic (Serbia) fue eliminado por cinco personales (min.40).

Partido correspondiente a la primera jornada del grupo C del Europeo 2009 de Polonia disputado en el Torbar Hall de Varsovia ante 3.000 espectadores.
Pau Gasol miró el aro con extrañeza. Aquello no era normal. Había fallado cuatro tiros libres seguidos y uno más de propina que tuvo que repetir. Después llegaron otros tres errores más antes de acertar con el primero. Si hubiera sido el único que tuvo un día horripilante no habría pasado nada. Lo malo es que a él, que se le notó falto de ritmo de competición, le acompañaron sus diez compañeros -Rudy lo padeció desde el banquillo-. Serbia, que no ganaba a la selección española desde el 2001, se la llevó ayer por delante. España no sumaba dos derrotas seguidas desde el Europeo de 2005.
España tuvo otro día aciago en ataque. Parece que la Musa le ha abandonado. Acabó con 2/19 en triples y 15/28 en tiros libres. No es novedad. En el último partido en Lituana le ocurrió lo mismo. Entre los dos choques acumula un 4/35 y un 29/53. Complicado de entender en jugadores de la calidad de los actuales campeones del mundo. La derrota ante los lituanos debería haber servido de despertador ante el arranque del Europeo. Ayer se demostró que no fue así. Lo malo es que los rivales hayan encontrado la pócima para ganar a España y empiecen a faltarla al respeto. Tras un solo partido, ya es menos favorita de lo que todos hemos dicho.
Estar atascado en ataque era una de las pesadillas de Scariolo. El nivel defensivo de la selección no es excelente, pero lo compensa con el talento en la otra canasta. ¿Qué pasaría el día que eso no bastara para meterlas? Lo que ha ocurrido en los dos últimos encuentros. Ayer no defendió mal del todo, pero sigue faltando mala leche. Los serbios acabaron con el doble de faltas. No es cuestión de ser violentos, pero un palo a tiempo no viene mal.